La caceria
El rey, a quien la compañía del Maestro le placía, lo mandó llamar un día para salir a cazar osos. Los osos son animales peligrosos. El Maestro estaba aterrado ante la perspectiva, pero no podía zafarse del compromiso.
Cuando regresó al pueblo alguien le preguntó: -¿Cómo fue la cacería?.
-Maravillosa.
-¿Cuántos osos mataste?.
-Ninguno.
-¿Cuántos perseguiste.
-Ninguno.
-¿Cuántos viste?.
-Ninguno.
-Entonces, ¿cómo pudo haber sido maravillosa?
-Cuando es uno quien está cazando osos, “ninguno” es un buen número.
Comentarios
Publicar un comentario